Theo Parrish es uno de los grandes nombres del house americano. De los más respetados, que no es poco. Con una manera de proceder muy particular a la hora de dotar de una dimensión especial su sonido, este productor nacido en 1972 en Washington es uno de los más personales músicos de la segunda generación de housemasters americanos.

La música concebida como jeroglífico en que cada nota es un símbolo con mucho significado en la mente de quien la escucha. Música sagrada que conecta cuerpo y alma. Su mejor escaparate es su propio sello, Sound Signature, donde él mismo ha grabado casi toda su discografía ya sea en solitario o como cerebro del grupo The Rotating Assembly donde también encontramos a otro gran nombre como Marcellus Pittman. Así que con Parrish y Sound Signature, el house más espiritual también tiene cabida en Detroit.

“El amor por la música debería de ser la fuerza que mueve a cualquier artista, productor o Dj. Todo lo demás parte de esa base. Con ese amor, hacer sonidos se puede convertir en un tributo; Una expansión de ideas que nunca se olvidan. Utilizando el mismo razonamiento, de una manera abierta y con respeto, pinchar se puede convertir en una participación espiritual. Puede transformar unas horas de selección musical en una historia especial, escuchada a través del movimiento.”

Esta filosofía personal, le da forma y dirección a un sonido muy distintivo que es creado por Theo Parrish.

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